En la cocina de nuestro bar restaurante en el centro de Santander intentamos buscar la esencia de la gastronomía que nos hace únicos. España tiene muchísimos platos cargados de personalidad. Muchos son compartidos por todos. Pero otros tienen un origen muy concreto y, con el tiempo, se han hecho populares por todo el territorio. Por ejemplo, el pulpo a la gallega, o pulpo á feira.
Este plato, que, evidentemente, tiene su origen en Galicia, se ha convertido en una de las principales formas de preparar pulpo en España. ¿En qué consiste, exactamente, el pulpo a la gallega? Te lo explicamos, para que, cuando lo pidas en nuestro bar restaurante en el centro de Santander, lo disfrutes con ganas.
La elaboración empieza con la cocción del pulpo. Tradicionalmente, se hacía las llamadas polbeiras, grandes ollas de cobre, en las ferias de los pueblos. De ahí viene su nombre en gallego, es decir, pulpo al estilo de la feria. Antes, para que el pulpo quedara más blando, se solía golpear contra una piedra o roca de la playa. Pero ahora esto se sustituye con la congelación, que también tiene el efecto de romper las fibras musculares del animal. El pulpo, cocido hasta quedar tierno, se sirve cortado a tijera en rodajas sobre un plato de madera. A veces, se acompaña de patatas, que se cuecen en la misma agua y captan los pigmentos del pulpo. Por eso, quedan de color rosáceo.
Se le echa sal gruesa por encima, un chorrito de aceite de oliva y, por supuesto, pimentón. El pimentón es un ingrediente tan fundamental como el propio pulpo, el toque que define este plato. La elección entre usar pimentón picante o dulce suele quedar a discreción de los comensales. ¡En cada casa hay una tradición!
En Mesón Rampalay puedes encontrar deliciosos platos de la cocina cántabra, pero también otros muchos de nuestra rica y variada dieta mediterránea presente en cualquier rincón de nuestro país. Te esperamos en nuestro bar restaurante en el centro de Santander.